La nevera de una persona soltera y que vive sola está medio vacía, sin caprichitos y donde las comidas se resumen a lo primero que pillas....
Pero la cosa cambía cuando vives en pareja o se tienen niños.
En ese caso, se piensa en comprar más cosas "buenas" que sanas, se guisa más o se sale más a comer fuera y ya cuando se está seguro de la convivencia llegan los quilos de más.
Hay estudios hechos que cuentan que tanto ellos como ellas engordan y ponen por delante a los hombres. También cuentan que las mujeres lo hacen igual teniendo hijos que no. Cosa que ratifica que el amor engorda.
Pero yo creo que es más por dejadez, por la falsa seguridad de tenerlo todo hecho, ya me casé ya no me tengo que cuidar. Entonces uno/a deja de ir al gimnasio, deja de mirar lo que come, deja de cuidar su aspecto.
Error!!! no hay que dar nada por seguro, porque el amor no lo puede todo.
Y no sólo el amor puede ser el causante del desamor, también el amor puede ser el causante de mala salud.
Imágen, un varón con la tripa similar a la de una embarazada de 9 meses, de esos que ya no se ven los pies y a los que el cinturón sirve para sujetar la tripa y no el pantalón. Este hombre, tendrá por seguro problemas de espalda, de circulación y con una alta probabilidad de problemas de corazón.
Sé que lo llevo al extremo, pero todo se empieza de la misma manera, dejandóse, olvidando que hay que darle calidad a la vida, calidad al amor.
recuerda...
el amor llena el alma y el estómago! :-)
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