jueves, 22 de septiembre de 2011

Cuidando al cocinero

El pasado fin de semana, mi cuñado, cocinero de profesión, me preguntó qué podía hacer para que no le doliese tanto la espalda, que al pasar tantas horas trabajando en la cocina, le dolía todo. Yo le dí una serie de consejos y ahora a esperar que los cumpla y le vaya bien.

El oficio de cocinero, a mi entender, es duro. Se pasan horas y horas de pie, aguantando temperatura, volcados sobre el poyete preparando la comida, sujetando peso con las manos, muchas de las veces aguantando ollas pesadas y calientes, realizando movimientos repetitivos, un largo etcétera, que me hace pensar en multitud de posibles lesiones que puede acarrear un oficio como éste.

La realización de ejercicios, estiramientos en el puesto de trabajo y en casa con regularidad, disminuyen, de buena manera, las lesiones y aumentan la resistencia física para asumir el trabajo, en este caso, trabajar en la cocina.

Si nos paramos a pensar, la cocina es uno de los lugares más peligrosos de la casa. Imaginar ahora sortear esos peligros. Pues igual que evitamos cortarnos, que somos concientes de ir con cuidado de no quemarnos, también deberíamos cuidar nuestro cuerpo, prevenir lesiones y más si trabajas en ella.

Voy a analizar tres posibles lesiones (a nivel de fisioterapia) de todas ellas, las más comunes son:

Dolor cervical y/o lumbar, codo del tenista (epicondilitis)  y dolor en muñeca  (túnel carpiano). Dejo otras como el sindrome del manguito de rotadores o la tenosinovitis estenosante de Quervain para otras publicaciones porque creo que merecen un capítulo a parte.

Voy a desarrollar estas tres lesiones tomando a los cocineros como posibles candidatos a padecerlos, lo que no significa que el resto de profesiones u oficios estén exentos.


Estas  imagenes me servirán para ilustrar el dolor lumbar y el cervical



El dolor lumbar y/o cervical

Miremos al cocinero del gorro azul, analicemos su postura, imaginemos sus movimientos, sus acciones. La postura que tiene, mantenida en el tiempo, acorta su cadena anterior. Músculos como los esternocleidos, los pectorales, el recto abdominal, los flexores de cadera, se acortan, están en permanente contracción, lo que provoca que adquiera una postura curvada hacia delante. Inevitablemente le dolerá la espalda cuando quiera ponerse recto. Si además le añadimos el manejo de peso, como ollas, cajas de provisiones, le provocarán una solicitación excesiva de la columna lumbar. Corre el riesgo de sufrir hernias, protusiones, contracturas o inflamación de la musculatura de esta zona.

Ahora miremos a la chica y llevémoslo a un cocinero que pasa horas y horas trabajando en la cocina. La posición prologanda de la cabeza mirando hacia abajo y sumándole la tensión, el estres de preparar los platos con prontuiud para cumplir a tiempo los pedidos, provocan una sobrecarga en la musculatura cervical. Este hecho le puede acarrear a la larga, limitación del movimiento cervical, dolor, hernias cervicales, dolor de cabeza y acortamientos de la musculatura.

Epicondilitis (codo del tenista)

Afecta a los tendones de la parte externa del codo provocando dolor y perdida de fuerza como, por ejemplo, disminución de la capacidad de sostener una bandeja. Esta lesión está producida por la repetición de movimientos y giros: imaginemos repetir muchas veces, darle vueltas en una olla al estofado, la salsa o caldo, que se esté cocinando.

Y por último, sindrome del túnel carpiano



El nervio mediano proporciona sensibilidad y movimiento a la "región palmar" de la mano (palma de la mano, dedo pulgar, dedo índice, dedo medio y lado palmar del dedo anular).

El área en la muñeca por donde el nervio ingresa en la mano se llama túnel carpiano. Dicho túnel normalmente es estrecho, de manera que cualquier inflamación puede comprimir el nervio y causar dolor, entumecimiento, hormigueo o debilidad, lo cual se denomina síndrome del túnel carpiano.

El síndrome del túnel carpiano es común en personas que ejecutan movimientos repetitivos de la mano y la muñeca. La utilización de instrumentos como un abrelatas, un cascanueces o abrir una tapa de un bote de conserva repetidas veces, provoca esta lesión. Las consecuencias son dolor, debilidad, incapacidad de cerrar el puño, entumecimiento, calambres.

Para las lesiones citadas anteriormente, existen métodos preventivos y recuperación en el caso de lesión.

Prevención
Higiene postural, manejo correcto de pesos, acondicionamiento del puesto de trabajo a la altura del cocinero, acondicionamiento físico, utilización de aparatos eléctricos como  batidoras  y abrelatas eléctricos, estiramientos.

Recuperación
Ponerse en manos de especialistas, como fisioterapeutas y médicos rehabilitadores, que traten las lesiones y personalicen el plan de prevención para no recaer de nuevo y sobre todo...

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martes, 6 de septiembre de 2011

El Rey y su tendón de Aquiles

En la mitología griega, Aquiles, hijo de Peleo y de la diosa Tetis y nieto de Éaco, fue un héroe de la Guerra de Troya y uno de los principales protagonistas y más grandes guerreros de la Ilíada de Homero.


En la guerra contra Troya, Aquiles se mantuvo alejado de la lucha porque estaba indignado contra Agamenón hasta que su amigo Patroclo fue asesinado por Héctor; entonces volvió a la lucha y lo vengó con la muerte de Héctor. Aquiles pereció a manos de Paris, cuya flecha, dirigida por Apolo, atravesó el talón, único punto vulnerable de su cuerpo desde que su madre Tetis lo bañase en las aguas de la laguna Estigia, pero olvidando mojar el talón por donde le había asido.

En la célebre obra homérica, Aquiles suele ser calificado como «el de los pies ligeros», ya que se le consideraba el más veloz de los hombres.









El Rey, como Aquiles, es hombre y también vulnerable. A diferencia de Aquiles, en el caso de Juan Carlos I, su dolencia le ha llevado a ser operado por su rotura del tendón, a utilizar una bota estabilizadora y a someterse a rehabilitación para lograr, lo antes posible, volver a su vida normal.

El tendón de Aquiles es una banda grande de tejido ubicada en la parte posterior del tobillo. Este tendón, que conecta los gemelos con el hueso del talón, permite doblar el pie hacia abajo, colocarse de puntillas y despegar el talón del suelo al caminar.



Se usa casi todas las veces que uno se mueve. Pero los esfuerzos constantes pueden aumentar las probabilidades de que el tendón se lesione.

La tendinitis de Aquiles es la inflamación del tendón, generalmente debida al sobreesfuerzo del miembro afectado o a una torcedura. Puede ser que se inflame y adquiera pequeñas rasgaduras (tendinitis). Una rasgadura que atraviesa todo el tendón se conoce como "rotura del tendón de Aquiles".

En los últimos años se ha incrementado este tipo de alteraciones ya que de todas las lesiones deportivas el 20 o 30 porciento son de este tipo. Las mujeres y los deportistas ocasionales son los que presentan más posibilidades de sufrir una lesión en el tendón. Las mujeres por usar tacones y forzar a que esté en tensión constante y los "deportistas de fin de semana" por no calentar y estirar correctamente.

En el caso del Rey, viene producido por una sobrecarga de la extremidad tras su operación de rodilla. Debía usar muletas pero las abandonó antes de tiempo, usando solo una, y cargando el peso en la pierna sana. La sobrecarga y una torcedura fueron la causa de su rotura.

La operación a la que se sometió el Rey bajo anestesia epidural “ha consistido en la reparación de dicho tendón mediante cirugía abierta de reconstrucción y refuerzo con auto-injerto y plasma rico en factores de crecimiento”.
El parte médico, que está firmado por el cirujano Ángel Villamor, director de Traumatología de la clínica San José, y por el doctor Avelino Barros, jefe del Servicio Médico de la Casa del Rey.




El tendón de Aquiles puede tener varias patologías entre las cuales se encuentran:

Tendinitis: Inflamación del tendón; tendinosis: Degeneración del tendón; bursitis: Inflamación de las bursas, las cuales son bolsas llenas de líquido que se encuentran entre los huesos y el tendón, ayudando a éste a deslizarse con mayor facilidad; ruptura del tendón de Aquiles: Desgarro de la parte posterior de la pierna.

Cualquiera de las lesiones anteriormente citadas son incapacitantes, es decir, limitan el movimiento, la marcha, son muy dolorosas y tienen una recuperación muy lenta.

Generalmente, las roturas del tendón se suelen operar a las personas que son muy activas, para el resto de los casos, generalmente, se afrontan con medidas conservadoras.

El calzado, el deporte ocasional, la edad, el desgaste, el arco de los pies altos, son factores de riesgo. Intentar llevar un buen calzado que permita la flexión de los dedos y que no tenga una suela rigida o tacón de más de 2cm, practicar deporte con regularidad, estirar, calentar y/o usar plantillas en el caso de puente excesivo, son claros ejemplos de medidas preventivas.

Si en algún momento notamos dolor en la zona, hinchazón, problemas para caminar o hacer puntillas, debéis aplicar hielo e ir al especialista. El médico y los fisioterapeutas pueden tratar este tipo de lesiones para conseguir una pronta recuperación.

La terapia farmacológica con antiinflamatorios y antiálgicos, la terapia física incluye: ejercicios de fortalecimiento, masaje, estiramiento, ejercicios isométricos y terapia de ultrasonido.

La lesión que ha sufrido el Rey es una de las más severas y su intervención ha de ser inmediata, sin superar los diez días porque después de ese tiempo y por la condición del tendón, la retracción es importante y dificil de encontrar para restaurarlo.

La rehabilitación del Rey irá desde medidas para eliminar la inflamación, trabajo activo tras la primera semana, uso de la electroterapia, terapia manual, electroestimulación, hasta acabar tras tres semanas, cargando el peso corporal progresivamente,  caminando y conseguir la estabilización mediante ejercicios.

Lo importante es recuperar el músculo de la pierna constituido por la unión de los músculos gemelos y sóleo, que se insertan conjuntamente en el calcáneo del pie mediante el tendón de Aquiles, tan importante para caminar.

En deportes como el atletismo, el tenis o el pádel, hay que tener cuidado en realizar una buena ejecución de la técnica para no sufrir lesiones del tendón, siempre rodearse de profesionales y sobre todo...

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lunes, 5 de septiembre de 2011

¿Por qué sufre Rafa Nadal?

Tras ganar con comodidad a David Nalbandian y acceder a octavos de final, Rafa Nadal, en plena rueda de pensa torció el gesto, estaba sufriendo un fuerte calambre que le impedía moverse y seguir hablando.

Tal fue el dolor que sintió, que se vió obligado a solicitar la presencia de un fisioterapeuta y ser atendido, a puerta cerrada, en la misma sala de prensa.

Tras unos masajes y aplicación de hielo en la zona, pudo seguir adelante con la entrevista asegurando: "Me ha dado una rampa (calambre) en la pierna, nada más. Se me ha cargado el cuádriceps y el isquio al mismo tiempo y no me podía mover. Pero no pasa nada, mañana estaré entrenando sin problemas".



http://www.youtube.com/watch?v=X7mD_bbMr9I

Los calambres de piernas están caracterizados por los siguientes síntomas: dolor intenso en la pierna, tensión muscular e inhabilidad de mover la pierna durante el calambre.

¿Por qué aparecen los calambres?

Son muchas las causas que pueden provocar los calambres: embarazo, fiebre…, pero lo más habitual es que surjan cuando el músculo ha realizado un esfuerzo muy intenso y también son frecuentes mientras se duerme. Quizás el origen sea la falta de potasio.

Para intentar prevenirlos, es imprescindible realizar estiramientos antes y después del ejercicio. Beber abundantes liquidos, ya que la deshidratación es la mayor causa de aparición de los calambres y tener en cuenta la ropa que se utiliza durante el ejercicio, debemos intentar que la ropa no apriete, que la circulación fluya libremente.

El sodio y el potasio son  los minerales que intervienen en el control de la contracción y relajación muscular. Por ello, cuando hay niveles bajos, pueden presentarse calambres, especialmente en las piernas.

La bomba de sodio (Na+)  y potasio (K+) cumple un rol muy importante en la producción y transmisión de los impulsos nerviosos y en la contracción de las células musculares.

Algunos fármacos, como los diuréticos (prescritos para la hipertensión) o los corticoesteroides (usados en la inflamación y en la alergia) pueden disminuir los niveles de potasio.

Alimentos que contienen potasio y que ayudan en la prevención de calambres y recuperación muscular son: el plátano y el kiwi.
Tras la aparición de un calambre, se recomienda: detener inmediatamente la actividad que se está realizando estirar, masajear el músculo afectado, aplicación de hielo o calor según criterio del fisioterapeuta, la hidratación y la administración de potasio.

Si el músculo sigue afectado y el dolor continúa, se podría recurrir a medicamentos antiinflamatorios, siempre y cuando con el consentimiento de un profesional, que en otros casos puede recetar medicamentos antiespasmódicos.

La electroestimulación (programas de capilarización, oxigenación y resistencia aeróbica) es una buena herramienta para evitar, para prevenir, los calambres.

En resumen, el mejor tratamiento para prevenir los calambres es una dieta balanceada, en la que no falten azúcares ni sales, beber agua en cantidad durante el esfuerzo (no mucha cantidad de golpe cuando se la necesita, sino a sorbos a cada rato aunque no se tenga sed), rodearse de profesionales que nos guien, antes, durante y después del esfuerzo físico y...

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sábado, 3 de septiembre de 2011

Llamada de socorro desde Irlanda

Sábado por la mañana, en mi buzón de hotmail, un mensaje, son noticias desde Irlanda. Mi prima al querer levantar una maleta en la oficina, se quedó enganchada y se ganó un viaje en ambulancia al hospital.

Me cuenta que llevaba tiempo con dolor pero que no le puso remedio, demasiado trabajo y poco tiempo para cuidarse. Esas son las razones que te explican todos los pacientes cuando vienen a la consulta. El cuerpo, por suerte es muy sabio, te va avisando y cuando no le haces caso, te para.

Ahora, ya está en casa, dolorida y deseando ponerle remedio. Me pregunta que si hace Pilates, Yoga o Natación. Como ya he comentado anteriormente en otros posts, las tres disciplinas son buenas, solo hay que tener en cuenta qué causó la lesión, si es de origen muscular o vertebral y rodearse de profesionales que le indiquen qué puede y no puede hacer.

Para empezar y cuando le baje el dolor, ha de empezar con estiramientos y fisioterapia, y más adelante añadirle ejercicios de refuerzo abdominal, correción postural, el yoga y el pilates son buenos para estos objetivos, y por último reforzar la musculatura de la espalda.

El trabajo, las prisas, las presiones de cumplir objetivos pueden ocasionar tensiones en el cuerpo que luego nos pasen factura. Obviamente hemos de trabajar y pasar tiempo, a veces, en la misma postura o realizando movimientos repetitivos y mi consejo es compensar.

y eso, ¿cómo se hace?

El lumbago es una de las dolencias más comunes, el motivo es sencillo, las vértebras lumbares soportan mucho peso y a través de ellas se reparten los vectores de fuerzas que vienen de la parte superior del cuerpo y del tren inferior. La zona lumbar es una zona muy móvil al igual que las cervicales, con lo que tienen peligro de mayor inestabilidad.

Es vital que mantengamos la musculatura lumbar y abdominal en perfecto estado para que no sufran las vértebras.  Si tenemos tripa, si nuestros abdominales están distendidos, podemos sufrir problemas lumbares ya que traccionan las vértebras y aumenta la curva lumbar provocando un cambio en la alineación y una variación en el reparto de fuerzas.

En resumen, debemos mantenernos activos, cuidar nuestra postura, nuestra condición física, rodearnos de profesionales y sobre todo...

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