lunes, 21 de marzo de 2016

Endometriosis, esa gran desconocida que afecta a 1 de cada 10 mujeres.

La endometriosis es una enfermedad que ha llegado a mi de manera cercana y personal y que afecta a 2,5 millones de mujeres españolas.

¿ Conoces realmente la endometriosis?



La endometrosis para hacerlo sencillo, es el resultado de una parcial evacuación del endometrio durante la menstruación, parte de la regla que se queda en el interior (útero, ovarios, trompas, pelvis, abdomen), puede crear infertilidad, adherencias, dolor, inflamación de los tejidos y formación de quistes que crecen con cada ciclo menstrual. 



Es una enfermedad crónica silenciosa. Crónica porque ocurre cada mes. Silenciosa para la sociedad, no "pareces" enferma pero lo estás. No se cura con un analgésico o antiínflamatorio y has de pasarlo lo mejor puedas cada vez, cada mes.


¿Hay solución?

Por el momento la solución es ir apagando fuegos. Analgésicos para el dolor, cirugía para ir "limpiando", tratamientos hormonales para parar la menstruación, tratamientos de fertilidad para las que quieren ser madres.


Hay mujeres que descubren que tienen endometriosis cuando quieren ser madres y no lo consiguen. Y otras que a pesar de sufrir desde temprana edad, no han descubierto que les ocurría por el desconocimiento de la patología misma y la pobreza en los protocolos de medicina. 




El periplo de la mujer que conozco empezó hace ya varios años, en 2012 fue operada por primera vez y en 2014 por segunda. Dos tratamientos de fertilidad y ahora le dicen que sufre de endometriosis y que ha de hacer una dieta especial. Qué hasta que no pierda el peso que consideran necesario, no la volverán a someter a otro tratamiento de fertilidad y que entre tanto igual la operan por tercera vez ya que vuelve a tener quistes.

Toda una odisea que mina la moral a cualquiera y que deja a la mujer en tierra de nadie, con sus pensamientos, sus ilusiones y sus miedos.

Si pensamos un poco, seguro que mujeres cercanas a nosotras tiene regla dolorosas que la dejan en la cama. El 10% de las mujeres a nivel mundial sufren de ello y por desgracia no hay cura por el momento. 

La importancia de la alimentación y del ejercicio para disminuir la endometriosis. 

Esta semana he estado hablando con un Psiconeuroinmunologo, le comenté el tema y me dio una explicación que hoy por hoy me parece coherente. Relaciona la alimentación, la producción de insulina con la alteración del sistema inmunitario.

En el siguiente enlace encontrarás un artículo de una psicoinmunologa y fisioterapeuta que lo explica muy bien.




La psiconeuroinmunología es un campo científico interdisciplinar que se dedica al estudio e investigación de los mecanismos de interacción y comunicación entre el cerebro (mente/conducta) y los sistemas responsables del mantenimiento homeostático del organismo, los sistemas: nervioso (central y autónomo), inmunológico y neuroendocrino, así como sus implicaciones clínicas.
George F. Solomon1

Cada vez estoy más convencida que una parte de las cosas que nos ocurren vienen dadas por nuestro estilo de vida o que precisamente éstas pueden ayudar con enfermedades. Por eso más que nunca voy a poner remedio e intentar mejorar en mis costumbres. 

Por lo pronto, este verano haré un curso de nutrición clínica y el curso que viene la formación en Psiconeuroinmunología. 

Sí sufres consulta, llama a las puertas que hagan falta, haz ruido, sal de la sombra, no es un estigma, hagámoslo visible y sobre todo, 


Mímate!

ADAEC Asociación de afectadas de endometriosis

www.adaec.org 

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domingo, 13 de marzo de 2016

Mímale! ¿Dónde duerme el bebé?

Hasta que no me fui a casa con mi bebé, no me había parado a pensar en dónde y cómo dormiría. Sí, le había preparado su habitación, tenía su minicuna a mi lado, pero no sabía cómo iban a ir las cosas.

Resultat d'imatges de COLECHO VERSUS BRAZOS

Supongo que inconscientemente tenía la creencia que primero dormiría en la minicuna, más practico dando el pecho, y luego la "pasaríamos" a su habitación. Es lo que hacen todos los bebés, no? 

Pues mi realidad fue que no, que dormía encima de mí. Como ya dije en anteriores posts, la pobre vomitaba mucho y a mí me entró el miedo de que si dormía en la minicuna, a pesar de tenerla al lado, podía no enterarme y tener un accidente. 

Instintivamente, la posicionaba de manera que las mantas nos llegaban a media cintura y mi cuerpo hacía de barrera con el de mi marido para evitar golpes accidentales. Cierto es, que yo parecía un sereno. Dormir, dormí poco pero ella dormía muy bien y pude reaccionar rápido a sus vómitos.

Resultat d'imatges de COLECHO VERSUS BRAZOS 

En esta era de Internet en el que los padres primerizos, miedosos de todo, devoramos información, conocí el término colecho. Dormir con tus hijos. Entonces empecé a leer sobre los inconvenientes, los beneficios, lo bueno, lo malo, las consecuencias futuras en su desarrollo y decidí cerrar el ordenador y dejarme guiar por el instinto, escuchar a mi bebé, ver cómo lo sentía ella. 

Cada bebé es un mundo, no hay una guía exacta de lo que va acontecer. Hay que escuchar a su bebé, mirarlo de verdad, sentirlo. 

Para mi primó más el riesgo de ahogarse en su vómito. Pasado un mes, como ella mejoró, la dormía en el brazo y después se queda en su cunita. Es una minicuna con barrotes, muy prácticos para apaciguarla en las microrupturas de sueño que tienen los bebés. 

Se decida lo que se decida, vaya la vida como vaya y a pesar de que los bebés tienen un gran reflejo de supervivencia, hay que asegurar el entorno. Si el bebé duerme contigo, hay que saber que los padres, tardan en tener esa conciencia inconsciente de que hay un bebé en la cama. Hay que evitar cubrirle con las mantas, sobre todo cuando son muy bebés y no levantan aún la cabeza. 

A mi me ha ido bien dormir semisentada y la cabeza del bebé un poco más alta que la de mi marido, así aunque el se cubriera durante las noches hasta las orejas, no había riesgo de cubrirla a ella. Y cuando estaba muy muy cansada, dormíamos en la camita de la habitación de la peque. 

El contacto del bebé con tu piel, con tu respiración con tos latidos, permite al bebé regular la temperatura de su cuerpo, bajarle los niveles de ansiedad, darle tranquilidad y a mi me encanta tenerla en brazos.


Si, lo reconozco, soy de esas madres que mecen a sus bebés hasta que duermen, que no les dejan llorar. A mi me nace dormirla en mis brazos, pasearla en brazos (distancias cortas) y si se despierta por las noches, cogerla y dormirla de nuevo.  Cosa que no me cuesta nada, ya que cuando posiciona su cabecita en mi pecho, se vuelve a quedar frita. 

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Ya he oído, "se va a malcriar", "¿aún la duermes en brazos?", "Ah, tú eres de esas que sirven de cama a su bebé". Y también me han dicho " aprovecha que ya se harán mayores" " Pues no veo que mis hijos (5) les haya pasado nada por dormir al bracito" "Tranquila que ellos mismos se irán a su camita cuando lo sientan  (madre de gemelos de 3 años)". " ¿A cuántos conoces que vayan al psicólogo porque sus madres los tenían en brazos?, más bien por lo contrario"

Métodos hay muchos, los que "ponen" a dormir al bebé y si llora les dejan hasta que se duerme. Otras corrientes que duermen al bebé en brazos. Cada una expone sus razones y sus beneficios. Seguro que conocéis tod@s quiénes han "practicado" uno u otro.

Personalmente, yo intento adaptarme al ritmo de mi niña a lo largo del día. De acondicionar el entorno cuando veo que tiene sueño (luz, sonido,temperatura) e intentar calmarla cuando llora. Pienso que si está tranquila durante el día, si no se le genera estrés, es más fácil que se duerma.

Con esto no quiere decir que la tenga en una burbuja. Ella juega, se relaciona con el mundo igual que cualquier bebé, pero cuando quiere dormir, duerme y no la obligo a dormirse, la acompaño y ayudo cuando ella siente que quiere dormir. Y por ahora me funciona, alrededor de las 21h está durmiendo y y yo con ella ya que todavía no hace la noche entera y como me dijo alguien "si bebé duerme, mamá que duerma también"

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Siento que querer "acondicionarlos" a nuestro modo de vida no es lo que necesitan. No cuando son bebés. Ya habrá tiempo de que se acostumbren a nuestros horarios y nuestros ritmos de vida.

Ya veremos lo que el futuro nos depara, Sólo deciros desde mi inexperiencia, qué sintáis y qué hagáis lo que os haga (papás-bebé) sentir bien.

Y sobre todo, 


 Mímale!



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